lunes, 21 de enero de 2008

Una ciudad sostenible

Hoy en el periódico he visto una noticia que me ha llamado la atención mucho: en Abu Dhabi, el mayor de los Emiratos Árabes y uno de los mayores productores de petróleo del mundo, se predende construir la primera ciudad libre de contaminación.


La primera ciudad sostenible del mundo


Abu Dhabi, el mayor de los Emiratos Árabes y uno de los mayores productores de petróleo del mundo, planea invertir 15.000 millones de dólares en la primera fase de una iniciativa para desarrollar energía verde y construir la planta eléctrica de hidrógeno más grande del mundo.


La inversión formará parte de la Iniciativa Masdar, una empresa creada para desarrollar energía limpia y sostenible, según ha anunciado el Príncipe Mohammed bin Zayed al-Nahayn en la Cumbre para la Energía del Futuro celebrada en el Emirato. No detalló, sin embargo, ninguna fecha concreta.


"Me gustaría remarcar el compromiso del Gobierno de Abu Dhabi hacia la Iniciativa Masdar anunciando una inversión inicial de 15.000 millones de dólares", señaló. "El próximo mes se pondrá en marcha la ciudad Masdar, la primera ciudad libre de carbono del mundo".


El dinero irá a parar a infraestructuras, proyectos de energía renovable como una planta solar, y mano de obra, todo ello para colocar a Abu Dhabi como el líder en el mercado de la energía limpia, dijo el sultán Al Jaber, ejecutivo de Masdar (o Compañía de Energía Futura del Abu Dhabi).


El proyecto incluye planes para empezar a construir una ciudad con emisiones de carbono cero y residuos cero de hasta 15.000 residentes en el desierto en el primer cuarto de este año. "Lograr una ciudad de carbono cero es factible", aseguró Jaber.


A largo plazo, el proyecto algergará a 50.000 personas. La ciudad está siendo diseñada por el estudio del arquitecto británico Norman Foster.


"Se trata de un proyecto extremadamente ambicioso", explicó Gerard Evender, socio superior del gabinete de arquitectura de Lord Foster en Londres, que ha contado con un equipo al cargo del diseño durante nueve meses. "Nos invitaron a diseñar una ciudad de carbono cero. Para este lugar adusto, necesitamos retroceder en la historia y fijarnos en cómo se adaptaban los antiguos emplazamientos a sus entornos".

Los edificios se apiñarán como en una 'kashba', y el sistema de refrigeración procederá de torres eólicas que recogerán las brisas del desierto y expulsarán el aire caliente. Ningún edificio superará las cinco plantas de altura; y la ciudad estará orientada de noreste a suroeste para obtener un equilibrio óptimo de luz solar y sombra.


Se parecerá a numerosas ciudades construidas en la época de los carruajes de caballos. La mayoría de las carreteras tendrán sólo tres metros de ancho y 70 de largo, para conseguir desarrollar un microclima que mantenga el aire en movimiento; los techos permitirán que entre el aire y protegerán el interior del fuerte sol en verano.


Nadie se encontrará a una distancia superior a los 200 metros del transporte público, y las calles darán a plazas con columnatas y fuentes.


"De ninguna forma intentamos imponer una arquitectura estándar internacional en Masdar. Nos esforzamos por conseguir un equilibrio de luz y calor", explicó Evenden. "Esta zona padece únicamente tres meses de calor extremo, y el resto del año es bastante húmeda".


El sueño de todo arquitecto es construir una nueva ciudad, y el equipo de Foster explica que empezaron de cero. La idea se redujo a la cantidad de energía necesaria para su construcción y para vivir en dicha ciudad, dejando después que la energía solar se encargase del resto.


"Comenzaremos con una inmensa estación de energía solar que proporcione la energía suficiente para construir la ciudad. Cerca del 80% del espacio de los tejados se utilizará para generar esta energía, y dado que esperamos que la tecnología mejore según la vayamos construyendo, esperamos poder eliminar posteriormente la planta de energía solar. Digamos que tomaríamos prestada la energía del exterior, pero estamos intentando demostrar que será posible generarla toda dentro de los confines del emplazamiento", explicó Evenden.


Sinceramente, me alegro de que se empiecen a desarrollar este tipo de proyectos, sobre todo en esas zonas en las que pudieran primar otros tipos de interéses que no sean el medioambiental. Sin embargo, la verdad es que me resulta curioso por varios motivos.



  1. Por el lugar donde se va a llevar a cabo y quienes lo impulsan. Es una zona rica en petróleo, que en un principio considerariamos fuera de la imagen que se tiene del conjunto de paises "ecologistas" Al fin al cabo, su riqueza proviene de una de las mayores fuentes de contaminación y todos sabemos que el dinero mueve mucho.


  2. Por el tipo de construcciones que se van a construir. Se puede decir que son básicamente tradicionales, aquellas que se construian cuando no se disponía de todos los "recursos" que se tienen ahora. Esto me hace a mi pensar que cuanto más tenemos, más tontos nos volvemos: quiero decir que teniendo todos los conocimientos y recursos que tenemos nos dedicamos a despilparrarlos.

Esto nos lleva a dos conclusiones: los prejuicios no llevan a ningun lado y no siempre lo más moderno es lo mejor. Espero que esto sirva para que cunda el ejemplo en más lugares, aunque me temo que mientras que en países como Estados Unidos se siga negando los problemas medioambientales esto no va a servir de mucho...